Las alcachofas plancha me encantan. Pero es verdad que es de las verduras más complicadas para prepararlas así. Precisan un tiempo de cocinado largo y se queman. Me niego a cocerlas para luego asarlas. Por ello siempre las cortaba en láminas finitas y me perdía lo más divertido de este manjar: chupar cada hoja una a una, rascando con los dientes la carne, entretenido como cuando comes pipas, y llegar al corazón tierno... Uff como me gustan

Hoy he conseguido prepararlas a mi gusto y, como no, ha sido posible en la olla.

INGREDIENTES.-
1 K de alcachofas frescas
Sal en escamas, Maldon
AOVE
Medio vasito escaso de agua


ELABORACIÓN.-
Retiramos el trocito feo de tallo y cortamos longitudinalmente la alcachofa. Pelamos con un cuchillo afilado el tallo y quitamos las hojas exteriores. No quites todas. No se trata de dejar solo el corazón. Sólo las más duras.
Si quieres puedes restregar con limón para que no ennegrezca. Repite con todas las alcachofas

Pon a calentar un chorrito pequeño (una cucharada) de aceite de oliva, menú freír, 140 grados, 3 minutos. Saltea las alcachofas y cancela.

Añade la medida de agua y programa menú presión, 160 grados y 6 minutos. Este tiempo es orientativo, irá en función de lo tiernas que sean tus alcachofas. Terminado el tiempo despresurizamos manualmente y volvemos a programar menú freir, 160 grados, 3 minutos, añadiendo otra cucharada de aceite. Removemos para que no se peguen. Cuando estén a nuestro gusto cancelamos y sacamos con pinzas.

Servimos con sal en escamas que rompemos con los dedos y un hilo de aceite crudo.